El Athletic Club se lleva su tercera Supercopa de España al imponerse por 2-3 al FC Barcelona en la prórroga
La Cartuja de Sevilla acogió la final del primer título nacional. Un Barça que venía de vencer en los penaltis a la Real Sociedad con buena imagen frente a un Athletic que ganó 1-2 severamente al Real Madrid. Culés contra leones, todo un clásico del fútbol español. La realidad es que el Athletic se llevó la gran final mostrando coraje y actitud. Mérito para un club con esa filosofía que se resiste al fútbol moderno caracterizado por el dinero y las estrellas. Un título muy merecido que sabe a mucho.
Se esperaba un gran encuentro pero este arrancó de forma bronca y aburrida. Durante toda la primera parte apenas se crearon ocasiones en ambas áreas pero los vascos siempre dominaron el partido. Los leones conectaron rápidamente al escenario de la final con el planteamiento claro y obligó a los azulgranas a jugar a remolque y a lo que Marcelino quería. La presión asfixiante de los bilbaínos impedía salir al Barça y encontrar líneas de pase por la medular y condicionó el ideario de Koeman.
Tras 40 minutos de final poco vistosa se dieron dos goles en menos de 3 minutos. En el primer chute del Barça, Griezmann abrió la lata para los catalanes aprovechando la sociedad Messi-Alba. Duró poco la alegría en Can Barça ya que a la jugada siguiente los leones transformaron su primer tanto mediante Óscar de Marcos. Con este 1-1 se llegó al descanso. Merecido resultado para un Athletic que mandó en todo momento.
La segunda parte comenzó un tanto más agresiva que la primera parte. El Barça siguió aguantando al conjunto vasco sin despeinarse ni intentar encontrar espacios para dañar a los rojiblancos. El Athletic continuó con lo suyo y sacó su corazón y la casta para el 1-2 de Raúl García a balón parado que anuló el VAR. Los culés dejaron signos de fragilidad en situaciones defensivas que veían perder por falta de actitud y concentración.
Después del gol anulado del Athletic se vio el esplendor ofensivo del FC Barcelona, al menos durante 15 minutos. Se fueron acercando a la portería de Unai Simón y mediante una clásica jugada por la banda izquierda de Jordi Alba, Griezmann remató al primer toque para sellar su doblete y el 2-1 en el 75’ dejando el terreno llano para ser campeones. Koeman movió ficha en términos defensivos y sustituyó a Dembélé y Busquets mientras que Marcelino sacó todo su arsenal ofensivo y surgió de efecto. Villalibre empató el partido en el último minuto cuando el Barça ya celebraba el título. Los culés no defendieron la falta y dejaron rematar a éste a placer.
En la prórroga se percibió a dos equipos diferentes. Uno abatido y el otro con ambición de darle la vuelta al marcador. Tal fue así que Iñaki Williams en el 93’ se sacó un trallazo de la chistera (imparable para Ter Stegen) y marcó un golazo por toda la escuadra para el 2-3 que sería definitivo. Sin embargo, el Barça ni siquiera lo intentó y sucumbió a la presión y provocación de los leones.
A partir de aquí, poco más se vio del encuentro. El Athletic se disfrazó de equipo de la NFL dejando una imagen muy antideportiva y diferente a la del gran partido que cuajaron. Increíble que el cuadro vasco acabara sin expulsiones después de acciones tan salvajes. Messi acabó expulsado por primera vez con la camiseta del FC Barcelona tras un lance con Villalibre. Final 2-3. El Athletic, justo vencedor de la Supercopa de España 2020-2021. Marcelino se convierte en la “bestia negra” del Barça y hace historia al conseguir un título tan sólo en 2 semanas al cargo del equipo. Imagen pésima de los azulgranas que nuevamente decepcionan a su afición y dejan escapar una oportunidad de oro para conquistar un título que hubiera supuesto una inyección de moral brutal.
Oriol Alsina Anguís
Comentarios
Publicar un comentario